lunes, 13 de septiembre de 2010

Melodia de la semana, del mes, del año...


Muchos domingos, muchos lunes de madrugada, muchas tardes de aeropuerto recuerdo a Mara con las gafas de poeta terminando un verso, en mitad de un ejercicio de palabras: "... todavía no he aprendido a resolver las despedidas". La frase era ésta o se le parecía. Tengo que preguntarle, le hará gracia: "¿De verdad que para ti ha sido tan importante? Resolver las despedidas como quien se enfrenta a una fórmula matemática, como quien aplica un método y se pierde, porque nunca ha sabido leer bien los libros de instrucciones.

Luego un día, un poeta te enchufa en el spotify esta canción y descubres que las casas, como las pieles, como las lágrimas, tampoco son buenas para el álgebra de las soledades, que también ellas se pierden en los decimales del silencio y en las ecuaciones de las esquinas vacías.

Mi casa se queja, te echa de menos...



Mi casa está enferma no sé que le pasa.
Las luces se encienden.
No puedo apagarlas.
Las puertas chirrían
Y crujen los muebles.
Los grifos gotean
Y el suelo se mueve.

Mi casa no sabe que aún nos queremos.
Mi casa se queja, te echa de menos.
Si no estás en casa se escucha un lamento.
Mi casa se queja no aguanta el silencio.

No puedo orientarme
Si no estás en casa.
No encuentro la cama,
no encuentro nada.
Mi casa está fría,
mi casa está helada,
desde que te has ido,
no sé que le pasa.

Mi casa no sabe que aún nos queremos.
Mi casa se queja, te echa de menos.
Si no estás en casa se escucha un lamento.
Mi casa se queja, no aguanta el silencio.


Marc Parrot

4 comentarios:

Catalino dijo...

3meses han tenido que pasar para que te reconcilies con tu boquita!!

Enhorabuena!! Welcome back...

Animos, que estamos esperando mas entregas!! Recuerdas lo de las propiedades liberadoras de tension de la escritura??

Besos!!

genialsiempre dijo...

En efecto, se echaba de menos esa boquita....
Y ahora resulta que hasta la casa le echa de menos!!.
Pues esperemos que vuelva a escribir diariamente, así la casa sonreirá

Menchu dijo...

Entré en tu blog y me gustó.
Cádiz es mi ciudad adoptiva, todavía tengo q ir a darme el último baño.
Seguiré visitándote con tu permiso.
Saludos.

Equilibrista dijo...

Se te echaba menos, Fátima.

Preciosa la entrada. Mara es que sabe mucho de las matemáticas de la vida.

Un beso

PD: ah, y me gusta el dibujito