Noviembre me trae una película que pocas veces quiero ver. Esta noche, además, he soñado que llovía, mucho. Que llovían todas las gotas saladas que yo sé que siguen dentro. Llovía y el agua me llegaba a la cintura, podía nadar dentro y no me asustaba. Llovía y no hacía frío. Podía ponerme a cubierto y, empapada, sentir mis pies bien secos. Quizás estoy perdiendo el miedo a dejarme llover.
Hoy llueve dentro pero fuera hace mucho sol.
Supongo que no está mal para empezar...
Hoy llueve dentro pero fuera hace mucho sol.
Supongo que no está mal para empezar...
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